miércoles, 29 de octubre de 2014

Cuando leí: Aitsu no Daihonmei.



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Título: Aitsu no Daihonmei (Su favorito).

Mangaka: Tanaka Suzuki.

Tomos: 6+

Reseña: Yoshida Yoshio es un joven estudiante que carece de atractivo masculino por ser muy bajo, de ojos almendrados y tener una pequeña cicatriz debajo de su ojo izquierdo. Satou Takahiko, en cambio, es alto, bien parecido y desprende un gran carisma que le encanta a las chicas (quizás demasiado)... ¿Cuál es la receta de ésta situación? Que Satou se le declara a Yoshida, pero también existen rumores de que Satou tiene una novia "favorita" de la cual nadie sabe quien es...


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Yoshida llorando por pensar que estoy
vituperando su manga.
Si hay algo que debo decir de entrada es que Aitsu no Daihonmei NO ES UN MANGA SERIO, es una bizarra comedia-romance que se decanta por situaciones absurdas y escolares la mayor parte del tiempo. Teniendo ésto en mente, realmente no me sorprende la falta de /duro contra el muro/ que hay aquí. Quizás podría suponer que es un manga que yo debería vituperar, pero no necesito pensármelo tanto como para decir que: No, porque en realidad tiene detalles que salen del típico yaoi. Muy a pesar de la comedia cliché que se carga, tiene sus puntos buenos, que en realidad, evita que le de una dura crítica.

El dibujo es poca cosa, en realidad, son muchos trazos rápidos y de movimiento que por fortuna no se distorsiona a último segundo. Tiene una parcial falta de detalles, aunque al inicio no se nota tanto, si ha medida que los tomos van aumentando. Todo lo que te ofrece como dibujo es básico y dinámico. Su estética, por ser apresurada, es también pobre. Hubo un momento en el que me pregunté si el chico popular se merecía ese título de la imagen no-tan-atractiva que me daba. Probablemente al personaje que le veo en mejor trazo es Yamanaka y el sólo aparece al principio de los capítulos y una que otra vez más tarde con Torachin.

En realidad ellos audicionan para una
porno gay con fetiche de animadora.
Sí, no es un dibujo brillante ni reluciente como sucede con Kaori Yuki, Kyuugo ó Hidaka Shoko. Pero cuando menos lo que no te ofrece Tanaka-sensei en su dibujo si lo hace en género, el cual es precisamente: la comedia romántica absurda. Si a mí me lo preguntan, creo que además de Aitsu no Daihonmei no me he leído un manga sotf yaoi que en todos sus capítulos contengan comedia (con excepción de algunos capítulos en la que su intención es algo más serio), y en parte eso lo hace disfrutable, porque a pesar de los malos entendidos y que ha Satou le llegó el periodo, en cada momento te suelta una risotada por tanta tonteria tamborileando de un lado a otro. Probablemente su punto fuerte es también su mayor defecto, porque mientras te ríes por varias de sus escenas hilarantes, por el otro lado te preguntas en que momento Satou y Yoshida harán su avance como pareja, pero en vez de toparte con una escena donde ambos se sinceran sólo te encuentras con otro número de comedia (que en realidad son geniales, a pesar de que son bromas un tanto clichés que ya he visto en otros animes antes).

Es por esa razón, que incluso para mi propia sorpresa, su estilo de dibujo simplista y dinámico encaja con la temática. Todo es tontería, ridiculez y unas cinco páginas de un extraño uke como Yoshida sonrojado. Sorprendentemente, todo le combina bien, de inicio a final el mensaje es: "Este manga es comedia, así que haremos por aquí algunas blasfemias de diálogo para hacerlos reír"... ¡Y funciona! Incluso la historia más oscura que Tanaka te saque del manga tiene un trasfondo a la tontería, y la verdad no incomoda a uno porque es algo que ya se esperaba y que incluso disfruta en esos pocos momentos de emo-Satou.

Por otro lado, sus personajes son casi como el estilo de dibujo. Apenas con trazos básicos y algunos clichés infinitamente vistos. Algo que me llamó la atención, y que ya después de avanzar la historia me decepcionó un poco, es que el personaje de Yoshida pierde cierta fuerza, y es una lastima porque me encantaba como era de inicio. A pesar de que Yoshida es un uke, tiene una personalidad muy parecida a la de un protagonista de manga shounen: idealista, justiciero, honesto y siempre con intención de ayudar incluso a las personas que no debería. Aunque aún se ven esos rasgos en él, me da la impresión que por darle más prioridad a su rol de uke, parte de su personalidad dinámica se perdió a favor de darle una más pasiva

Yoshida el justiciero... sonrojado, todo por el
bien del Boys Love comercial.
Satou es hermoso y terriblemente sádico... algo no tan sorprendente porque muchos semes lo son. Lo más interesante de él no son sus celos patológicos, su impulso posesivo o el hecho de que adora hacer sufrir a Yoshida con bromas pesadas (bueno, en realidad eso es interesante); sino su pasado, a pesar de que en inicio te lo explican, es sólo hasta que te plantean la historia cuando entiendes mejor la perspectiva del personaje. Probablemente su punto fuerte como personaje que desencaja del estereotipo de seme sea su pasado y la manera infantil en la que tortura a Yoshida (porque las otras torturas que he visto no son exactamente la de regalar chocolates picantes que provocan hinchazón en los labios). Además está el hecho de que él lo ama no por su aspecto físico sino por lo que Yoshida hizo por él, algo increíblemente más significativo que el atractivo como persona, y puede que incluso la idealización de Satou por Yoshida sea en parte el motivo por el que lo ama por su aspecto.

Los personajes "secundarios", por así decirlo, son en realidad sus amigos y conocidos de Yoshida, que tienen su momento para brillar (incluso sus compañeras de clases, que en varias ocasiones se enfrentan a chicas de otras escuelas como si fuesen delincuentes peleando por territorio). Tal como sucede con Akimoto, Makimura, Yamanaka y Torachin; a los cuales se les dedican dos o tres capítulos a sus situaciones particulares (pero con Satou y Yoshida siguiéndoles la pista).

(Me encantó ésta pareja secundaria, bastante
entretenida con el narcicista de Yamanaka)

En conclusión: Aitsu no Daihonmei es una comedia romántica entretenida. Su dibujo puede no ser detallista, pero sirve para las escenas dinámicas que llevan varias de sus viñetas. Es gracias a ésta interacción del uke nada afeminado y de apariencia 'poco atractiva' que hace la perspectiva interesante (y lo cierto es que realmente no son feos, sencillamente son masculinos con defectos bastante normales). Lo que me gusta del mensaje de fondo es que incluso alguien guapo como Satou no nació teniendo una apariencia agraciada e incluso es un chico introvertido que por su atractivo se ve obligado a socializar más. Su fallo es que rara vez abandona la comedia, y eso evita que la relación entre Satou y Yoshida avance al siguiente nivel, además de todos los "rivales" que tanto a Satou como a Yoshida les surgen (En serio, ellos seguramente fueron paridos por la generación espontánea). Las pocas escenas de 'drama' son buenas, porque no son exageradas ni demasiado emotivas, por lo que puedes leerlas sin que estalles en lágrimas o te induzca una depresión. Es un excelente manga para pasar el rato, pero no es recomendable si estás buscando algo serio, sobrio ó intenso, porque es todo lo contrario: ligero, entretenido e hilarante.


2 comentarios:

  1. Hola.
    ¡Oh! Éste maga lo comencé a leer hace mucho tiempo atrás y he esperado con ansias su final, ya que quiero ver algún avance en la relación entre Yoshida y Satou. Sí, porque como comentas, la historia es comedia y de la disparatada (de esas que no tienes ni idea con que saldrá o que aparecerá) y, lo principal, no hay avance alguno en la relación de Yoshida y Satou, no hay nada de nada... Nada.

    Aitsu no Daihonmei, me gusto, porque es una lectura ligera y es rápida de avanzar, además sus personajes están bien hechos (aunque con uno que otro cliché), pero bien hechos. Una de las partes que más me gusto, fue la historia de Satou, como comenzó su amor por Yoshida y todo lo que sufrió en la academia cuando era pequeño y gordo. Aunque lo que no me gusto, fue el mismo cliché que he leído en un montón de mangas: las chicas (montones) están siempre persiguiendo al tipo atractivo y aunque estos pasen por la calle, ellas miran, se enamoran y lo persiguen con sus miradas. Me molesta ese cliché.

    Y en cuanto al dibujo, no es el más estilizado ni más bonito, pero se ajusta mucho a la historia y le da un toque especial a la historia. hay un dicho por allí que dice: "que no hay que juzgar un libro por su portada".

    Bueno. Me gusto lo comentado en la entrada y la forma en que das tu comentario, directo y sin tapujos.

    Hasta la próxima entrada.

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    1. Holas, Ann~
      Me pasa igual que a ti, desde que el fansub de Barje y Drow desapareció anduve como vagabunda buscando otro que hubiera retomado el proyecto, apenas hace poco Chinmoku lo retomó y me puse a descargar sus nuevos capítulos traducidos. Chica, si Tanaka logra hacer un final decente con una resolución en la pareja de Satou y Yoshida, seré inmensamente feliz, ya que me leí hace unos años atrás Menkui (de la misma autora) y su último capítulo fue más aleatorio que la escena de las bananas en Aitsu no Daihonmei. Así que, esperemos que Tanaka haga un buen final con ellos dos.

      Los clichés de las hordas de mujeres enviciadas por un hombre son de los más molestos, pero como Tanaka maneja todo por comedia es normal que sobreexagere la dependencia fanática de las fangirls, además de que es el medio efectivo que justifica el "carisma y belleza" de Satou en su modo absurdo, pero como es comedia... pues se entiende. Si los autores lograran crear otra forma de justificar el poder de masas de un personaje además del fanatismo de masas con ojos en forma de corazón, sería espléndido.

      Definitivamente, el dicho encaja con Aitsu no Daihonmei, yo lo juzgué por su portada y me lleve una agradable sorpresa. Es demasiado entretenida y ligera como para no recomendarla.

      Gracias de nuevo por otro comentario, me encanta mucho leerlos :3.
      Hasta la otra reseña~.

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